El seguimiento de clics es un método utilizado por las empresas para observar y analizar cuántos espectadores visitan un sitio web y digerir su contenido durante un período de tiempo específico. Además de rastrear la gran cantidad de tráfico y el tiempo dedicado a cada página, las empresas pueden analizar cómo los visitantes interactúan con su sitio. Cada vez que un usuario hace clic en una página web o en un contenido con el mouse, el cliente registra la acción mediante la técnica de seguimiento de clics. A medida que el usuario continúa navegando, estas señales se recopilan para su posterior análisis.
Los clics también se pueden denominar eventos o acciones que tienen lugar como resultado de un clic. Los eventos pueden variar desde iniciar una ventana emergente, interactuar con elementos multimedia, descargar o imprimir un archivo e iniciar sesión en una cuenta.
Este método puede generar información útil para el personal de ventas y marketing para medir la efectividad de un mensaje o campaña en particular, comprender mejor al público objetivo y probar la experiencia del usuario.
Ejemplos de seguimiento de clics
Es posible rastrear si un visitante de un sitio interactúa con diferentes tipos de contenido. Algunos ejemplos incluyen lo siguiente:
- Se presionan botones, pestañas, barras de desplazamiento y menús desplegables.
- Los enlaces externos se copian, se colocan sobre ellos o se abren.
- Cuando se inician, abandonan, completan o envían formularios en línea.
- Un video se inicia, se detiene, se reproduce o se pone en pausa.
- Un visitante comienza un podcast y qué tan avanzado es el episodio que escucha.
- Los gadgets y widgets se colocan sobre o se interactúa con ellos.
- Se hace clic en una imagen, se abre o se guarda.
- El movimiento del mouse se registra durante el período de tiempo que el visitante está en la página web.