Un inversor ángel, a veces denominado simplemente ángel, es una persona que invierte fondos privados en una empresa o producto por motivos personales. El término a veces se contrasta con los inversores de capital de riesgo, que proporcionan capital inicial para cosas similares de fondos corporativos o de sociedades, con la ganancia financiera como principal motivo.
Las motivaciones para los inversores ángeles incluyen el interés en un área en particular o la fe en el producto, así como razones más personales. Por ejemplo, una persona con un niño discapacitado podría estar motivada para invertir en tecnologías que apoyen la accesibilidad.
ángel se utilizó por primera vez en este sentido a principios de la década de 1900, para referirse a los empresarios prominentes que respaldaban los espectáculos de Broadway. El empresario estaba motivado por el prestigio asociado a la participación en una empresa artística, además de las posibles ganancias económicas de espectáculos exitosos. El uso moderno del término en este sentido se originó en un estudio de 1978 realizado por William Wetzel, profesor de la Universidad de New Hampshire, sobre cómo los empresarios obtuvieron capital semilla.
Los grupos de ángeles a veces se organizan como una red de ángeles para una inversión más eficaz.