Cartel

Un cartel es una red comercial compuesta por fabricantes, socios de la cadena de suministro, distribuidores y financieros que siguen siendo independientes desde el punto de vista financiero pero que trabajan en estrecha colaboración para garantizar el éxito de los demás. En países que valoran un mercado competitivo sobre un mercado colaborativo, los cárteles pueden ser ilegales. En los Estados Unidos, por ejemplo, los cárteles son ilegales y se han promulgado leyes para evitar que los cárteles fijen precios y creen monopolios. En Japón, sin embargo, las ventajas que ofrecen los cárteles se fomentan a través de una ideología conocida como keiretsu.

Los cárteles solo pueden existir en determinadas condiciones de mercado. La demanda del producto debe ser confiable, por ejemplo. En el caso del fueloil, por ejemplo, los consumidores no pueden recurrir inmediatamente a otro producto para satisfacer sus necesidades, lo que significa que, en general, pagarán el precio que establezca el cartel. Cuando un cartel puede fijar precios y exigir niveles de producción, asegura que los miembros no tendrán que lidiar con la competencia externa. La falta de competencia real también significa que las empresas están menos motivadas para mejorar la infraestructura o el servicio de lo que podrían estar de otra manera. 

Los cárteles pueden operar abiertamente donde no estén prohibidos por la ley. Se reconoce que la OPEP (Organización de Países Exportadores de Petróleo), por ejemplo, funciona como un cartel que controla el mercado del petróleo. Ser multinacional permite a la OPEP operar legalmente bajo las leyes de comercio exterior de los Estados Unidos. Generalmente, los cárteles son ilegales en países donde la fijación de precios y otras prácticas anticompetitivas están prohibidas por la legislación antimonopolio. En estos entornos y en los mercados negros, los cárteles a veces operan en secreto.

Los productores también pueden funcionar como un cartel sin tener ninguna colaboración aparente. En Estados Unidos y Canadá, por ejemplo, a veces se dice que las empresas de telecomunicaciones operan como un cártel porque su estatus de oligopolio limita las opciones de los consumidores.